Resumen

La Artritis Reumatoide (AR) es una enfermedad crónica de carácter inflamatorio que afecta a las articulaciones, principalmente a las extremidades. Se caracteriza por una inflamación en la membrana sinovial de las articulaciones que conlleva a una destrucción del cartílago, incluso del hueso, provocada por una respuesta autoinmunitaria. A pesar de que la etiología de la enfermedad es incierta, los factores genéticos y ambientales parecen desempeñar un papel importante en la activación del sistema inmunológico y sus respuestas inflamatorias. El tratamiento de la AR debe dirigirse a controlar la actividad inflamatoria, así como evitar la progresión de las lesiones articulares y prevenirlas, en la medida de lo posible. Con la intención de describir desde el punto de vista molecular cuáles son los mecanismos implicados en el desarrollo de la artritis reumatoide y su relación con la terapia antirreumática, se realizó esta investigación de tipo revisión bibliográfica. Desde el análisis realizado se consideró que el tratamiento de la artritis reumatoide debe ir dirigido a su posible casuística siendo un baluarte los nuevos conocimientos sobre genética y biología molecular a fin de realizar un mejor manejo terapéutico, así como evitar posibles complicaciones en la evolución de los pacientes.

Palabras claves: artritis reumatoide, respuesta inmune, inflamación, antirreumáticos.